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Lo encontrarás como martillo eléctrico o martillo demoledor, una herramienta muy común en el sector de la construcción, que sirve principalmente para perforar o destruir. El peso, la potencia o la velocidad de perforación son algunas de las características a tener en cuenta antes de decidirse por uno. Además, claro está, del tipo de martillo, que puede ser eléctrico, neumático o térmico. ¿Estás comparando entre las distintas opciones de martillos eléctricos del mercado? Para facilitarte la tarea, hemos elaborado esta sencilla idea. ¡No te la pierdas!
Martillos eléctricos: ¿cuál elegir?
Verás que existen distintos modelos de martillo percutor, como el martillo eléctrico, el térmico (o de gasolina) o el neumático. Los neumáticos son más potentes y pesados. Los térmicos son los que solemos ver en obras públicas, también muy pesados (y ruidosos).
Por su parte, los martillos eléctricos o percutores son los más comunes y se caracterizan por ser muy versátiles, aptos para todo tipo de trabajos. Su funcionamiento es sencillo, similar al de un taladro; consta de un motor eléctrico que activa un pistón. Son ideales para levantar azulejos y baldosas, picar pavimentos o perforar tabiques que deseamos eliminar. A continuación, te dejamos algunas características a tener en cuenta antes de elegir el martillo percutor que necesitas.
Peso
A mayor potencia, más peso. Por eso es importante saber elegir el que se ajuste a las tareas que deseamos realizar. Lo normal, para las tareas que hemos mencionando antes, es elegir uno entre los 2,5Kg y los 6Kg. No es recomendable escoger uno más pesado, a no ser que necesitemos unas prestaciones elevadas concretas
Ubicación del motor
Los martillos que tienen situado el motor verticalmente son más pesados y suelen utilizarse para trabajar en vertical, como perforar paredes. Sin embargo, los horizontales son más livianos y están indicados para perforar en el techo
Potencia y fuerza
La potencia de este tipo de herramientas se expresa en Vatios (W). La fuerza, viene expresada en Julios (J) y las más habituales se hallan en un rango de 2-3,5J. Fuerza suficiente para desarrollas casi cualquier tarea. Si por el contrario hablamos de un uso más profesional, podemos encontrarlas hasta de 15J
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